Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2022

Luces en el cielo

Imagen
  Luces en el cielo   Me obligué a seguir comiendo, no podía dejar que el peso de la pérdida me quitase el hambre, debía de tener energías si quería sobrevivir. Trinché otro pedazo de chamuscada carne con mi mellado cuchillo y me lo metí en la boca, la había dejado demasiado tiempo al fuego y era dura de masticar, pero al menos estaba buena. Energías, sí, las necesitaba para cargar con mis pertrechos y seguir caminando hacia el este. Solo sabía que debía de dirigirme hacia el amanecer, cruzando el horizonte el número suficiente de veces hasta terminar encontrándome con algún atisbo de civilización. Un asentamiento, un poblado, una inexpugnable fortaleza, con suerte incluso la avanzadilla de algún floreciente reino o república. Algo. No pedía demasiado, tan solo un lugar en el cual poder hablar tranquilamente con otras personas, colaborar con ellas y sentirme a salvo. Mientras tanto, tendría que seguir usando la ballesta y puede que también el hacha para defenderme de los ocasionales sa

El rescate de Titania

Imagen
 El rescate de Titania Los tubos brillantes parecían pálidas luces feéricas a sus ojos. No comprendía lo que los demás hablaban a su alrededor; de hecho, era casi como si no hubiera nadie con ella. Solo tenía ojos para aquellos tubos. Qué podrían ser y qué hacían allí era algo que la intrigaba. ¿Tal vez eran prisiones de las hadas, donde encerraban a las más díscolas o las que habían cometido alguna fechoría? Incluso le parecía oír sus agudas vocecitas aullar desde el interior de aquellos objetos, fuera pidiendo ayuda o insultando a sus carceleros era algo de lo que no podía estar segura. Claro que también podía estar equivocada. Tal vez no se tratase de una cárcel para hadas malvadas. ¿Y si se trataba de una mazmorra para ocultar a su secuestrada reina Titania? Quizá se encontraba allí, oculta en uno de esos tubos, alejada de los suyos y en completa agonía causada por su soledad. Ella odiaba estar sola, lo que ahora parecía su destino, y estaba segura de que a la reina Titania, Señora

Emma y la Copa Dorada

Imagen
      Emma y la Copa Dorada    Era una estupidez salir de noche por aquella zona, sobre todo con los sueños perturbadores que Emma tenía últimamente. Soñaba con jaulas en las cuales era metida contra su voluntad, con personas que la ataban y la hacían daño, y por algún motivo con pájaros. Además, las normas eran claras, nunca salir del area que ella y los suyos tenían delimitada. Sin embargo, Emma sentía mucha curiosidad por vivir nuevas experiencias. El americano que la visitaba de vez en cuando le había hablado de un local llamado La Copa Dorada donde servían exquisios gin tonics y donde además tenían buen gusto con la música. No obstante, dicho local sólo abría por la noche y encima estaba fuera de su area. Aún así Emma se decidió a saltarse las normas por una vez en su vida y por fin aventurarse a conocer a nuevas personas en nuevos lugares. Ansiaba romper con su monótona rutina.   Como ya había fantaseado muchas veces con aquello, tenía preparado un cuidadoso plan para saltarse

Videollamadas de domingo

Imagen
 Videollamadas de domingo —¿Qué vas a comer hoy? Al escuchar aquello mi mente se queda en blanco. ¿Otra vez? ¿Es que tiene que preguntarlo todos y cada uno de los días del año? Trato de responder sin poner los ojos en blanco, que aunque el vídeo falla mucho seguro que lo ve. —Pollo asado con ensalada. —¿Otra vez? ¿No comiste eso el domingo pasado? ¿O fue el anterior? Hija, hay que introducir variaciones en la dieta, no se puede estar comiendo todos los días lo mismo. Mira que te lo tengo dicho, come cosas diferentes los domingos. Puedo entender que entre semana varíes poco, por aquello del trabajo y la falta de tiempo. Y el sábado es el día de hacer las labores de la casa, así que pase que no tengas muchas ganas de cocinar. Pero los domingos son perfectos para cocinar una paellita un día, unas acostillas con patatas otro, o si no esas comidas con verduras que están tan de moda últimamente. ¿Pero pollo asado y encima comprado? —Mamá, te recuerdo que la cocina nunca fue lo mío. Y a pesar